sábado, 19 de noviembre de 2016

TEÓLOGOS VATICANOS ESTUDIAN QUÉ DEBE HACERSE CON UN PAPA HEREJE

TEÓLOGOS VATICANOS ESTUDIAN QUÉ DEBE HACERSE CON UN PAPA HEREJE


Silveira-herético-Papa-tesis
[La noticia es que alguien ha informado que en el Vaticano corre de mano en mano un libro del brasileño Silveira, escrito en 1975 durante el nefasto pontificado de Montini/Pablo VI, en el que se plantea la hipótesis del “papa hereje”, o sea si ello es posible y sus posibles consecuencias.
Este post que como muchos más, debemos al sitio Novus Ordo Watch, nos da una aproximacion al caso. Yo, personalmente, no estoy de acuerdo sobre todos los extremos que toca ese sitio. A continuacion expongo mi convicción, que no es mía sino de los autores insuperables en quienes me fundo. Recuerdo a los lectores que el tema de la infalibilidad pontificia abarca no sólo el caso de la herejia de los papas sino también de los posibles errores contra la Fe, que de suyo no depondrían al papa de su cargo. Hay abundante doctrina sobre todo ello, bajo la categoria infalibilidad pontificia, en la pestaña superior del blog.


Resumo mi posición en lo siguiente:
-Un hereje no puede llegar a ser un papa canónicamente electo.
-Un papa no puede caer en la herejía en el ejercicio de su cargo (enseñando, rigiendo o promulgando leyes). Aunque quizás, pudiera caer en la herejía en cuanto “hombre particular” o “privadamente”. Sin embargo, según San Roberto Belarmino lo contrario es más probable y piadoso para ser creido. Según San Roberto la opinión que sostiene con certeza que un papa no puede caer en la herejía ni siquiera como hombre privado (que fue la del teólogo Pighius en el Siglo XVI, es “probable y fácil de defender”). Sin embargo él, aunque, la sostiene no le da categoría de certeza como hace Pighius, sino la de mera probabilidad.
-Algunos oponen a esto la opinión de San Roberto, la llamada “quinta oppinio” en el célebre cap. 30 de su libro (libro II de las controversias), en el que estudia y acepta el caso de un papa caído en la herejía. Esto lo cree  el autor del siguiente post. Pocos se dan cuenta de que esta hipótesis excluye el caso del papa “en el ejercicio de su cargo” y se limita al caso de un papa caído en la herejia “en cuanto hombre particular” (que considera improbable) . Esto se demuestra leyendo respectivamente los capítulos 2 y 6, del libro 4 , Tomó II ( puede obtenerse en el widget de la parte inferior del blog; y puede adquirirse traducido al inglés en dos volúmenes- también edición digital- bajo el título “On Roman Pontife”, en Amazon) de las Controversias (ambos traducidos en un post del blog). En ellos respectivamente demuestra la infalibilidad de los papas en su enseñanza y la posibilidad de herejías (que dice ser algo improbable) en “cuanto persona privada”.
-La opinión de San Roberto es seguida también por San Alfonso.
-Algunos interpretan erróneamente el canon de la infalibilidad de la Constitución Pastor Aeternus extra-limitando su alcance en dos puntos:
1- Creyendo que el papa sólo es infalible si “habla ex cathedra”  o sea entendiendo con ello erróneamente que debe enunciar EXPLÍCITAMENTE las condiciones expresadas en el canon, siendo así que ellas se dan, implícitamente, también en cualquier enseñanza del papa definida como obligatoria aunque carezca de pompa y solemnidad.
2- Estableciendo abusivamente que SÓLO entonces sería infalible. Esto es lo que erróneamente sugiere el Catecismo Mayor de San Pio X, que añade al canon, por su cuenta,  ilegítimamente, “Allora soltanto”  (que fue pronto prohibido, y sustituido por el catecismo de la Doctrina Cristiana, de 1912, del mismo papa, de mucha mayor autoridad por las características de su promulgación, que faltan en el anterior. En realidad el Papa es también infalible como cualquier obispo unido a él, en el Magisterio Ordinario y Universal. Más aún, como hemos demostrado en el blog, siguiendo a San Roberto y San Alfonso y al catecismo de 1912 de San Pío X, el papa es infalible en toda su enseñanza a la Iglesia, o sea en su Magisterio Ordinario, aunque no revista el carácter de la obligatoriedad propia de los dogmas. Esto quiere decir que EN SU MAGISTERIO, no puede caer en la herejía y tampoco en el “error contra  la Fe“. Otra cosa es, en sus actividades privadas. Por ejemplo expresando herejías, al escribir libros o artículos o predicando a los íntimos. Ahora bien San Roberto esto lo cree improbable pero en la hipótesis de que fuera así, no vacila en decir siguiendo a los Santos Padres, a los que nombra, que “ipso facto” él mismo se depondría de su cargo.
Así pues, resumiendo, si un papa legítimo cayese en la herejía  en sus actividades privadas, (EN EL EJERCICIO DE SU CARGO ES IMPOSIBLE) quedaría inmediatamente depuesto (por ejemplo Ratzinger, si hubiera sido papa legítimo,  en su libro en dos volúmenes sobre Jesús de Nazaret, que cualquier verdadero  católico puede ver que está plagado de opiniones heréticas, y en el blog, algunas, las hemos denunciado numerosas veces). Dicho lo anterior sin perjuicio de que también en su Magisterio existan opiniones heréticas, derivadas de su aceptación del herético Concilio VATICANO II, del que también fue parcialmente  fautor.  Ahora bien, si algún papa hubiese caído en herejía en su Magisterio (cosa frecuente en los papas conciliares y últimamente en la Exhortación ‘Amoris Laetitia’ de Francisco) no es que resultaría depuesto ipso facto, sino que sería la demostración  palpable de que nunca habría sido papa,  debido a una elección nula por su herejía antecedente a la elección. Porque un verdadero papa no puede caer ni en la herejía ni en el error contra la Fe en su Magisterio sea del orden que fuere (Extraordinario, ordinario, etc..)]
Todo lo anterior no es una opinión o convicción mía, sino que es la enseñanza de doctores como San Roberto Belarmino y San Alfonso.así como la de numerosos teólogos anteriores a la crisis modernista. Es más, se contiene en el magisterio infalible del Concilio VATICANO I, en la Constitución Dogmática ‘Pastor Aeternus’que establece la Fe indeficiente de los Romanos Pontífices como también lo había establecido la bula de Sixto IV “Licet Ea” al condenar solemnemente la proposición herética de Pedro de Osma “Ecclesia Urbis Romae errare potest “(Puede obtenerse un estudio de ella pulsando en la barra derecha del blog) ]
Sigue la traducción del interesante post de Novus Ordo Watch.

Nos informan que los teólogos del Vaticano estudian qué hay que hacer ante un papa hereje

Silveira-herético-Papa-tesis
Continúan noticias de la que se armado. Como informa hoy el  vaticanista Giuseppe Nardi, digno de toda credibilidad,  corre por el Vaticano un estudio teológico de 1975 hecho por el laico  brasileño  Arnaldo Vidigal Xavier da Silveira. No se trata de un estudio cualquiera: Se trata de un estudio sobre si es posible que un Papa pueda llegar a ser hereje, y si es así, qué consecuencias se podrían derivar.
¿Qué es  posiblemente lo que  podría haber dado ocasión para que  los teólogos del Vaticano presten atención a una hipótesis en principio tan incomprensible ? ¿Es que ellos se dedican a estudiar hipótesis abstractas para ejercitar su intelecto? 
Para decirlo claramente, la apostasía de Francisco en nuestros días se ha vuelto tan patente y ha llegado a tales cotas que incluso los conocidos modernistas romanos del Vaticano están empezando a caer en la cuenta de que existe un problema aunque los conocidos cobistas de Francisco como Jimmy Akin y Dave Armstrong no dejan de dar rebuscadas explicaciones. 
He aquí una traducción del informe de Nardi sobre el asunto:

… [El] estudio  “Hipótesis teológica de un papa herético” del jurista brasileño Arnaldo Xavier da Silveira corre de mano en mano por el Vaticano en la traducción italiana de Marco Solfanelli publicada el pasado mes de junio, la cual  está siendo estudiada con atención por los teólogos y prelados de Roma.
Los dubia de los cuatro cardenales son parte de una resistencia que se está expandiendo cada vez más y empieza a pasar de su fase preliminar a una nueva fase. En caso de que Francisco no ponga  fin a la paradoja de negarse a confesar claramente la doctrina inmutable de la Iglesia, de la que es la cabeza, entonces los próximos meses prometen ser espectaculares.
Tres años y medio después del inicio de su pontificado, Francisco está llegando a sus propios  límites. La impresión, dada por medio de sus gestos y palabras, de albergar una intención latente de  cambiar la doctrina de la Iglesia debe en algún momento, o bien tomar ya una forma definitiva o por el contrario debe ser definitivamente descartada. Francisco se encuentra acorralado en medio de la misma atmósfera de cuya creación él mismo es el responsable. Ya no se trata de expresiones espontáneas aquí y allá  que por ser improvisadas no son vinculantes. Su trabajo pastoral y su capacidad de liderazgo, que exigen un gran sentido de responsabilidad y un carácter ejemplar, están llegando a sus límites. Esto podría hacer que el [pontificado] de Francisco termine siendo un fracaso. 
(Giuseppe Nardi, “Stößt Papst Franziskus un cerco Grenzen – Amoris Laetitia und die der Dubia Kardinäle?” , Katholisches.info 17 de noviembre, de 2016; la traducción de la traducción inglesa es nuestra).
Echemos una rápida ojeada al estudio en cuestión.
La traducción italiana de la monografía de Da Silveira se titula ‘Ipotesi Teológica Di Un Papa Eretico’ (“Hipótesis teológica de un papa herético”). El trabajo fue publicado originalmente en portugués en 1975 y reeditado en una nueva edición italiana en junio de este año – obviamente, alguien previó que habría  una alta demanda de la misma en el idioma hablado en el Vaticano.
La traducción al inglés del estudio de Da Silveira (por John Russell Spann) ha sido publicada on line :
Da Silveira no es sedevacantista, aunque simpatiza con nuestra posición. Aunque no condenamos su estudio, tampoco lo respaldamos sin reservas. Escrito en la década de 1970, mientras el infernal Pablo VI daba vueltas por el Vaticano enfundado en su sotana blanca, este libro fue un intento motivado por su buena fe para ver si el “pontificado” de Giovanni Battista Montini pudiera  “salvarse ” reduciendo sus acciones y enseñanzas a los límites de la ortodoxia que un verdadero Papa debería guardar, reproduciendo para este intento opiniones de  teólogos de escasa importancia e hipótesis menos probables. Pero lo que quizás, usando opiniones poco probables (si no condenadas),  resultó efectivo en el caso de Pablo VI en 1975, claramente no tiene fuerza convincente en los casos de Juan Pablo II , Benedicto XVI , y sobre todo de Francisco, todos los cuales han superado a Pablo VI de una forma u otra.
Un breve video ayudará a entender lo que queremos decir:
Uno de los errores fundamentales que muchas personas cometen al enfrentarse a la cuestión de un “Papa hereje” – lo que es una contradicción en los términos, si alguna vez ha habido uno así  – es que confunden la capacidad de errar con la profesión de la herejía : El hecho de que, en sentido estricto, un Papa pudiera errar cuando no ejerce su infalibilidad, no quiere decir que puede enseñar o profesar la herejía . No todos los errores son herejías, después de todo, ya que para ser la cabeza de la Iglesia, el Papa debe ser miembro de la Iglesia, condicion para lo cual es profesar de la fe verdadera (no la incapacidad de errar en todo momento):

De hecho, solamente son miembros de la Iglesia los que han sido bautizados y profesan la verdadera fe , y no han tenido la desgracia de separarse de la unidad del Cuerpo, o han sido excluidos por las autoridades legítimas por faltas graves cometidas .
(Pío XII, Encíclica Mystici Corporis , n 22;. El subrayado es nuestro.)
La profesión de una fe falsa – que es lo que llama herejía – hace automáticamente que el hereje deje de ser miembro de la Iglesia: “Porque no todo pecado, por grave que sea, es tal que por su propia naturaleza separe al hombre del cuerpo de la Iglesia, como lo hace el cisma o la herejía o la apostasía “(Pío XII, Mystici Corporis , n. 23). Aquí la infalibilidad ni siquiera se contempla.
En pocas palabras: ¿Puede un verdadero Papa volverse hereje? No parece que fuera posible:

. La Santa Iglesia  [está] edificada sobre la piedra, esto es, sobre Cristo, y sobre Pedro o Cefas, el hijo de Jonás, que antes se llamaba Simón, porque en modo alguno había de ser vencida por las puertas del infierno, es decir, por las disputas de los herejes, que seducen a los vanos para su ruina.
Así lo promete la verdad misma, por Quien son verdaderas cuantas cosas son verdaderas: Las Puertas del infierno no prevalecerán contra ella [Mt 16, 18], y el mismo Hijo atestigua que por sus oraciones impetró del Padre el efecto de esta promesa, cuando le dice a Pedro: Simón, Simón, he aquí que Satanás…
[Lc 22, 31]. ¿Habrá, pues, nadie de tamaña demencia que se atreva a tener por vacua en algo la oración de Aquel cuyo querer es poder? ¿Acaso no han sido reprobadas y convictas y expugnadas las invenciones de todos los herejes por la Sede del príncipe de los Apóstoles, es decir, por la Iglesia Romana, ora por medio del mismo Pedro, ora por sus sucesores, y han sido confirmados los corazones de los hermanos en la fe de Pedro, que hasta ahora no ha desfallecido  [en la Fe] ni hasta el fin desfallecerá?
(Papa San León IX, Carta Apostólica In Terra Pax Hominibus , Ch 7;.  Denz 351. ; Añadido subrayado).
pues no fué prometido a los sucesores de Pedro el Espíritu Santo para que por revelación suya manifestaran una nueva doctrina, sino para que, con su asistencia, santamente custodiaran y fielmente expusieran la revelación trasmitida por los Apóstoles, es decir el depósito de la fe. Y, ciertamente, la apostólica doctrina de ellos, todos los venerables Padres la han abrazado y los Santos Doctores ortodoxos venerado y seguido, sabiendo plenísimamente que esta Sede de San Pedro permanece siempre intacta de todo error, según la promesa de nuestro divino Salvador hecha al príncipe de sus discípulos: Yo he rogado por ti, a fin de que no desfallezca tu fe y tu, una vez convertido, confirma a tus hermanos [Lc. 22, 32]
Así, pues, este carisma de la verdad y de la fe nunca deficiente, fué divinamente conferido a Pedro y a sus sucesores en esta cátedra, para que desempeñaran su excelso cargo para la salvación de todos; para que toda la grey de Cristo, apartada por ellos del pasto venenoso del error, se alimentara con el de la doctrina celeste; para que, quitada la ocasión del cisma, la Iglesia entera se conserve una, y, apoyada en su fundamento, se mantenga firme contra las puertas del infierno dispersa por el orbe, 
(Concilio Vaticano I, Constitución dogmática Pastor Aeternus , Ch 4;. . Denz 1836-1837; el subrayado es nuestro).
Aunque la Iglesia nunca ha solucionado definitivamente el asunto directamente, la abundancia de pruebas sugiere fuertemente que es no posible que un verdadero Papa pueda llegar a ser hereje – lo que significa que los “papas” del Vaticano II, que de hecho fueron herejes, nunca fueron verdaderos Papas, incluso ni uno solo de ellos, y esto no es tan evidente como lo es en el caso del “Papa” Francisco . Pero en cualquier caso, incluso si fuese posible que un verdadero Papa pudiera llegar a ser hereje, como enseña San Roberto Belarmino , él inmediatamente por ese mismo hecho, solo y sin una declaración, dejaría  de ser Papa.
Para todos los que buscan de un poco de claridad en profundidad sobre el tema, recomendamos los siguientes enlaces:
Sean cuales sean las conclusiones de los teólogos del Vaticano modernista después de haber ponderado el estudio de la cuestión sobre el Papa herético, están casi fuera de lugar, al menos por ahora. Lo importante de esta historia en este momento es que las autoridades del Novus Ordo dentro del Vaticano están planteando seriamente la cuestión de si el Papado es compatible con la idea de herejía pública – por la razón obvia de que el hombre al que consideran el Papa es un hereje flagrante, lo cual ya no se puede negar.
El descontento y malestar sobre Francisco se ha dejado sentir en el Vaticano desde hace cierto tiempo. Hay que recordar que hace más de un año, después de que el aspirante papal dio el visto bueno para la anulación exprés de matrimonios , se informó de que no existía ningún expediente anti-Francisco que circulara por la curia vaticana la cual lo había acusado de introducir el “divorcio católico “. Por lo tanto, vamos a ver cómo funciona todo esto. Recuerden,  también, que ellos todavía tienen una “copia de seguridad” dentro de las dependencias vaticanas,  el llamado “Papa emérito” Benedicto XVI. No se le debe descartar  todavía – no parece que todo este asunto de la renuncia ya haya  “terminado”.
Ahora sólo hay que esperar hasta que alguien en el Vaticano se dé cuenta de que la Guardia Suiza puede expulsar a Francisco de las dependencias vaticanas y lo ponga en un vuelo de regreso a Buenos Aires …