miércoles, 24 de diciembre de 2014

¿El día del abeto? ¿El cumple de Papá Noel? Este vídeo te muestra el origen de la Navidad

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  2. ¿El día del abeto? ¿El cumple de Papá Noel? Este vídeo te muestra el origen de la Navidad

Mie 24·12·2014 · 7:09h 7

¿Es una campaña comercial? ¿O tal vez el día del abeto? A lo mejor es una fiesta para celebrar el solsticio de invierno… Y ahora que algunos han importado el Halloween, ¿será que toca celebrar el cumple de Santa Claus (o de Papá Noel, como se le conoce aquí)? Pues va a ser que no. Esta noche celebramos un motivo de alegría y esperanza. Este vídeo te cuenta por qué.
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Lo publiqué yo en Youtube en 2008, usando escenas de la película “Natividad”. El tema que suena en el vídeo es un villancico gallego, “Nadal de Luintra”, interpretado por Berrogüetto. Aunque no sepáis la lengua de Rosalía de Castro no os costará comprender lo que relata, pero como siempre es mejor entender la canción, os pongo aquí su letra y la traducción al español:
Cara Belén camiña
unha Nena ocupada
fermosa, en canto a ela,
San Xosé a acompaña. Chegaron a Belén
e pediron pousada,
responderon de adentro
con voz alborotada.
¿Quen chama á miña porta,
quen á porta me chama?
Somos Xosé e María
que pedimos pousada.
Se traen cartos que entren
e senon que se vaian.
Cartos non traerei,
máis que un real de prata.
Isos son poucos cartos,
pídanno noutra parte.
San Xosé xa penaba,
María o consolaba.
Non te apenes Xosé,
non te apenes por nada,
¿qué máis cartos ti queres
que isto que me acompaña?
Hacia Belén camina
una Niña ocupada
hermosa, al lado de ella,
San José la acompaña. Llegaron a Belén
y pidieron posada,
respondieron de adentro
con voz alborotada.
¿Quién llama a mi puerta,
quién a la puerta me llama?
Somos José y María
que pedimos posada.
Si traen dinero que entren
y sino qué se vayan.
Dinero no traeré,
más que un real de plata.
Eso es poco dinero,
pídanlo en otra parte.
San José ya se apenaba,
María lo consolaba.
No te apenes José,
no te apenes por nada,
¿qué más dinero tú quieres
que esto que me acompaña?
Con la Navidad celebramos la venida al mundo de ese Niño, llamado Jesús, que era esperado como un libertador de la talla de reyes, pero siendo el Hijo de Dios hecho hombre, fue a nacer en un humilde pesebre, y los primeros que le adoraron fueron unos pobres y sencillos pastores. Tras curar a enfermos, devolver la vista a los ciegos y hacer otros numerosos milagros, tras predicar la palabra de Dios y añadir a la ley divina un nuevo mandamiento -”amaos los unos a los otros como yo os he amado”-, a Jesús le torturaron, le juzgaron y le crucificaron. A los tres días resucitó y mandó a los suyos a dar testimonio de todo ello por el mundo, para guiar a sus semejante por el camino hacia el cielo. Puedes creerlo o no, claro, pero el hecho es que dos mil años después, el día en que celebramos la venida al mundo de Jesús sigue siendo una jornada universal de alegría y esperanza, porque la llegada de ese Niño al mundo marcó un antes y un después para la Humanidad. ¿Cómo es posible que un Bebé nacido en medio de tanta pobreza, entre pastores, en un humilde establo, haya acabado siendo alguien tan importante? Si quieres entender la razón, lo mejor que puedes hacer es leer su historia aquí. Leerla te descubrirá muchas cosas no sólo sobre Jesús, sino sobre ti mismo, porque tú y yo, y todos los seres humanos, estamos reflejados en ella. En ella nos vemos directamente interpelados por ese misterio al que llamamos Dios, a quien el ser humano viene buscando desde mucho antes del inicio de la historia. Un Dios que se hizo hombre en un pequeño bebé, entre pajas y en una familia modesta. Piénsalo.
¡Bo Nadal! ¡Feliz Navidad!